Unas ricas y fáciles brochetas de calabacín y panceta, el contrapunto ideal para saobrizar los calabacines.
Lavar y secar los calabacines bien
Cortamos en láminas finas
Sobre una lámina colocamos una loncha de panceta curada
Colocamos el queso sobre la panceta
Tapamos con otra lámina de calabacín
Enrollamos sobre si mismo, haciendo un rollito
Insertamos un palillo de brocheta
Rociamos con aceite de oliva el cestillo de la freidora
Colocamos las brochetas en el cestillo
Ahora si optamos por poner queso rallado o mozarella es el momento
Rociamos con un poco más de aceite
Programamos la freidora a 180º durante 15 minutos
Cuando estén doradas están listas.
Podemos poner la cantidad de rollitos en las brochetas que deseemos.
El queso rallado o mozarella es opcional, pero le da un toque dorado y riquísimo.
Si no tenemos freidora de aire podemos hacerlos al horno, precalentado a 180º durante 18/20 minutos aprox, dependiendo del horno.
Necesitamos dos láminas por cada rollito.