La típica tarta de manzana de toda la vida, una de las más conocidas en repostería. La combinación de sabores es ideal. Dulce, acido y crujiente del hojaldre.
Pintamos el molde con un poco de aceite para que no se pegue
Colocamos centrada la masa de hojaldre sobre el molde
Acomodamos bien
Cortamos el exceso de masa
Vertemos la crema pastelera y extendemos bien por toda la base de la tarta
Colocamos las laminas de manzana sobre la crema
Horno precalentado a 200º horneamos durante 25/30 minutos
Dejamos atemperarse un poco a temperatura ambiente
Llevamos al congelador una hora
Dejamos en la nevera hasta el momento de servir
Pintamos con la mermelada y colocamos las frambuesas
La mermelada es al gusto, de fresa, melocotón, albaricoque o como en mi caso de higo.
Tenéis la receta de la crema pastelera aquí
Si la masa de hojaldre es redonda, mejor que mejor, si no no hay problema.
Si vemos que la manzana se empieza a quemar, podemos tapar con un poco de papel de aluminio.
La dejamos atemperar un rato y o bien, la dejamos que enfríe por completo y llevamos a la nevera durante tres o cuatro horas. O llevamos al congelador por espacio de una hora y luego a la nevera hasta la hora de servir, el ahorro del tiempo es considerable.